El Gobierno de Santa Fe implementó nuevas armas no letales para reforzar la seguridad en Rosario. Desde este sábado, agentes de la Policía provincial patrullan con lanzadoras Byrna, un dispositivo que utiliza balas de gas pimienta y polímero para inmovilizar o disuadir agresores sin recurrir a fuego real.
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Las Byrna funcionan con dióxido de carbono, tienen alcance de hasta 20 metros y pueden operar con distintos tipos de munición. En esta primera etapa, se distribuyeron 67 unidades en Rosario, que serán utilizadas por la Brigada de Orden Urbano, el Comando Radioeléctrico, la PAT y la Guardia Provincial.
El gobernador Maximiliano Pullaro, junto a la vicegobernadora Gisela Scaglia y el ministro de Justicia y Seguridad Pablo Cococcioni, supervisó el primer patrullaje con este equipamiento en la ciudad. Los restantes dispositivos serán distribuidos en el resto del territorio santafesino.
En total, el Ejecutivo provincial adquirió 100 armas Byrna mediante licitación, junto a pistolas Taser, bodycams y cartuchos adicionales, con una inversión superior a $1.670 millones. Estas herramientas se enmarcan en la política de modernización y profesionalización de la fuerza policial.
El programa apunta a incorporar alternativas de baja letalidad que permitan actuar frente al delito con mayor control, menor riesgo y mejor respuesta operativa. Las autoridades remarcaron que el objetivo es “proteger la vida de los ciudadanos y también la de los agentes”, sin perder capacidad de acción.