El Gobierno Nacional dispuso este martes la eliminación completa de los derechos de exportación aplicados sobre aceites, grasas lubricantes y subproductos del sector hidrocarburífero. La medida quedó establecida en el Decreto 811/2025, publicado en el Boletín Oficial con las firmas del presidente Javier Milei, el jefe de Gabinete Manuel Adorni y el ministro de Economía Luis Caputo.
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Con la norma, la alícuota del 8% que regía desde 2020 queda sin efecto, en línea con la política de desregulación y reducción de cargas impositivas que viene impulsando la administración libertaria. Desde la Secretaría de Energía señalaron que la eliminación de la retención permitirá incrementar un 70% las exportaciones hacia 2028, fortaleciendo la producción y la capacidad instalada de las empresas vinculadas al sector.
El mensaje oficial remarcó que la decisión busca “bajar la presión tributaria, devolver libertades al sector privado y mejorar la competitividad internacional”, destacando su impacto en el empleo y en la actividad industrial ligada a la cadena petrolera.
La medida se complementa con el esquema general del programa económico, que apunta a estimular inversiones, ampliar la producción local, mejorar la disponibilidad de divisas y consolidar la expansión del downstream energético. Aunque implica una reducción de ingresos fiscales en el corto plazo, el Ejecutivo sostiene que la baja de impuestos favorece el crecimiento, aumenta la recaudación futura y corrige las distorsiones heredadas.
Las retenciones habían sido reinstaladas en 2020 por la administración kirchnerista como mecanismo de recaudación. Con este decreto, el Gobierno avanza en su objetivo de reducir impuestos que, según Milei, “penalizan la producción y frenan el desarrollo”. La decisión constituye un nuevo paso dentro de la hoja de ruta para modernizar y desregular el sector energético, considerado estratégico para el crecimiento económico y la generación de empleo privado.